Una reciente sentencia del Tribunal Supremo de EEUU ante una reclamación que afectaba a Planned Parenthood frente al estado de Carolina del Sur, ha puesto de nuevo en el candelero la financiación de esta empresa,
Por otra parte el 3 de julio, tras la votación de la Cámara de Representantes que ha aprobado el proyecto de ley de reconciliación presupuestaria, Planned Parenthood ha anunciado sus planes de llevar a la administración Trump a los tribunales por la disposición que «retira la financiación» a los centros de salud de Planned Parenthood (Planned Parenthod to the Trump Administration: We’ll Sec You in Court)
La organización ha puesto el grito en el cielo y en la portada de su web grita: URGENTE: El Congreso ha «retirado la financiación» a Planned Parenthood. El impacto de la ley será inmediato y devastador. Los pacientes perderán el acceso a la atención médica. Haga hoy mismo su donación deducible de impuestos para que podamos seguir protegiendo y prestando asistencia, pase lo que pase.
En este debate surge a menudo la pregunta sobre cuáles son los servicios que realmente ofrece esta organización. Un informe reciente del Charlotte Lozier Institute (CLI) arroja luz sobre esta cuestión, comparando la oferta de Planned Parenthood con la de otros centros públicos de salud en Estados Unidos.
El enfoque principal y casi único de Planned Parenthood es el aborto
Según el análisis del CLI, si bien Planned Parenthood es una organización conocida por ofrecer diversos servicios de salud, su enfoque principal, particularmente en lo que respecta a la atención a mujeres embarazadas, es el aborto.
Aunque ellos afirman que
Planned Parenthood es el principal proveedor y defensor de la atención sanitaria sexual y reproductiva de alta calidad y asequible para todas las personas, así como el mayor proveedor de educación sexual del país. Con casi 600 centros de salud en todo el país, las organizaciones de Planned Parenthood atienden a todos los pacientes con cuidado y compasión, con respeto y sin juzgar, esforzándose por crear un acceso equitativo a la atención sanitaria.
El dato clave que se obtiene del propio informe anual 2022-23 de Planned Parenthood, indica que el aborto representa el 97% de los servicios que ofrece a las mujeres que buscan ayuda con su embarazo.
Menos pacientes pero más abortos. Planned Parenthood llevó a cabo un récord de 402,230 abortos en 2022-23, lo que supone un aumento de más de 9500 (2 %) con respecto al año anterior y un aumento del 23 % desde 2013. El número de pacientes aumentó solo un 1 % con respecto al año anterior y se redujo un 23 % con respecto a 2013.
Mientras, los servicios prenatales, la atención en caso de aborto espontáneo y las derivaciones para adopción solo representaron el 1,6 % (6316), el 0,9 % (3604) y el 0,4 % (1721), respectivamente
La organización continua advirtiendo que, si se le retira la financiación federal, hasta 200 de sus instalaciones podrían verse obligadas a cerrar, lo que, según ellos, comprometería la salud de las mujeres al disminuir el acceso a los servicios. ¿Es esto cierto?
La alternativa: Centros públicos de salud con atención integral
El estudio del CLI contrasta este enfoque con una “vasta red de proveedores” que ofrecen atención integral y no se centran principalmente en el aborto. Este análisis reveló una gran cantidad de clínicas de salud públicas capaces de brindar servicios de salud asequibles y accesibles a las mujeres.
Los hallazgos son notables:
- Hay 15 centros de salud comunitarios por cada centro de Planned Parenthood.
- Estos centros comunitarios ofrecen atención integral, lo que significa que cubren una gama más amplia de necesidades de salud que no están enfocadas en el aborto.
- El estudio identificó dos tipos principales de clínicas que cumplen esta función:
- Centros de Salud Calificados Federalmente (FQHCs): Son financiados por la Administración de Servicios y Recursos de Salud y ofrecen atención médica a pacientes de bajos ingresos con tarifas ajustadas según sus ingresos. Se estima que hay 5,500 sitios de FQHCs que ofrecen atención integral a mujeres de bajos ingresos.
- Clínicas de Salud Rurales (RHCs): Sirven a personas que viven en áreas rurales con acceso limitado a la atención médica y reciben financiación de los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid. Se calcula que existen 3,300 sitios de RHCs.
- En total, se estiman unos 8,800 sitios de FQHC y RHC, en comparación con las 579 ubicaciones de Planned Parenthood (físicas y virtuales).
Estos centros están diseñados específicamente para satisfacer las necesidades de comunidades desatendidas que de otro modo tendrían dificultades para acceder a la atención médica, incluyendo atención ginecológica y planificación familiar.
Accesibilidad y financiación
Una de las preocupaciones planteadas por Planned Parenthood es que su cierre afectaría particularmente a los pacientes en áreas remotas o rurales. Sin embargo, el estudio del CLI argumenta que los FQHC y RHC están estratégicamente ubicados en estas áreas para asegurar el acceso a la atención. Por ejemplo, en Ohio, se encontraron 202 centros de salud comunitarios que ofrecen atención a la salud de la mujer, frente a 21 ubicaciones de Planned Parenthood. Incluso cuando la ubicación de Planned Parenthood en Cleveland cerró, el CLI afirmó que las mujeres seguirían teniendo acceso a clínicas de salud asequibles.
Recientemente, el Senado de los EE. UU. aprobó una versión de un proyecto de ley de reconciliación presupuestaria que incluye una disposición para poner fin a los pagos de Medicaid estatales a organizaciones sin fines de lucro que realizan abortos y recibieron más de 800,000$ en fondos federales en 2023. Planned Parenthood recibió más de 792 millones en subvenciones y pagos gubernamentales ese año, superando ampliamente este umbral.
Planned Parenthood, a través de su presidenta Alexis McGill Johnson, ha afirmado que sus centros de salud proporcionan servicios esenciales más allá del aborto, como el control de la natalidad, pruebas de enfermedades de transmisión sexual y exámenes de detección de cáncer, y que la eliminación de fondos sería una política “imprudente” que “empeoraría el ya deficiente sistema de atención médica del país”.
Por otra parte, organizaciones pro-vida, como Susan B. Anthony Pro-Life America, han celebrado la aprobación de la disposición como una “victoria crucial en la lucha contra el aborto” y enfatizan que las mujeres “merecen opciones reales de atención médica como los centros públicos de salud que superan a Planned Parenthood 15 a 1 y brindan una atención mucho más integral y que afirma la vida”.
El estudio del Charlotte Lozier Institute muestra que Planned Parenthood se enfoca predominantemente en el aborto, mientras que existe una extensa red de centros públicos de salud que ofrecen una gama más amplia de servicios de salud integrales y que están preparados para atender las necesidades de las mujeres, incluso en áreas desatendidas, lo que contradice la idea de que el cierre de Planned Parenthood dejaría a las mujeres sin opciones de atención médica.
Si se quiere atender más a la salud de las mujeres, Planned Parenthood no es el camino adecuado.