El Hospital Clínico de Barcelona, el Centro Médico Teknon y el Hospital General de L’Hospitalet de Llobregat han puesto en marcha un estudio para investigar los resultados de la aplicación de distintas terapias con células madre procedentes de médula ósea para reparar fracturas graves de huesos que no pueden soldarse. … El Hospital Clínico de Barcelona, el Centro Médico Teknon y el Hospital General de L’Hospitalet de Llobregat han puesto en marcha un estudio para investigar los resultados de la aplicación de distintas terapias con células madre procedentes de médula ósea para reparar fracturas graves de huesos que no pueden soldarse.
El ensayo, impulsado por la empresa Aastrom Biosciences y el Instituto de Terapia Regenerativa Tissular (ITRT) de Barcelona, utiliza en cinco tratamientos este tipo de células para reparar roturas graves de huesos mediante injertos.
De momento, los resultados obtenidos demuestran que estas técnicas son “seguras” y “no se han detectado efectos secundarios”, según dijo la empresa Aastrom, que ahora ampliará este trabajo para incluir a más pacientes.
Una de las personas que participa en el estudio “está mostrando mejoras de movilidad y ausencia de dolor como resultado de proceso de curación del lugar de la fractura”, informaron los médicos responsables del ensayo, Carlos Solano-Puerta y Lluís Orozco.
“Estamos muy satisfechos con los resultados de estos primeros cinco tratamientos y con el proceso que utiliza la tecnología de células madre de Aastrom para la reparación de tejidos”, aseguró Orozco, director científico del ITRT.
Autoinjerto
Las terapias habituales con injertos óseos se emplean para reparar fracturas graves de brazos y piernas, así como para reconstruir el hueso de la mandíbula o soldar la espina vertebral. Habitualmente se extrae material ósea de la cadera para injertar en otras zonas.
No obstante, este tratamiento quirúrgico, denominado autoinjerto, provoca en la mayoría de casos dolores crónicos y complicaciones en la zona de la cadera donde se ha realizado la extracción, según los especialistas.
En este estudio, las células para la reparación de tejidos desarrolladas por Aastrom, entre las que se incluyen células madre adultas, se han combinado con un producto sintético y se han aplicado directamente en la zona fracturada sin los efectos posteriores del autoinjerto.