Un 10 por ciento de los españoles que espera un trasplante vital fallece esperando una donación Profesionales sanitarios y juristas han debatido en Santander sobre las autorizaciones de trasplantes y el ‘testamento vital’E.P. Santander.- Un 10 por ciento de los españoles que espera un trasplante vital fallece esperando que se produzca … Un 10 por ciento de los españoles que espera un trasplante vital fallece esperando una donación
Profesionales sanitarios y juristas han debatido en Santander sobre las autorizaciones de trasplantes y el ‘testamento vital’ |
E.P. Santander.- Un 10 por ciento de los españoles que espera un trasplante vital fallece esperando que se produzca una donación y alrededor de 5.000 personas están en lista de espera en España para recibir un órgano.
Por ello, profesionales del ámbito sanitario y jurídico han debatido estos días en Santander sobre la forma de reducir el número de negativas familiares, así como el número de negativas judiciales, en las que no se obtiene la autorización del juzgado de guardia.
Junto a ello, también es fundamental la celeridad con la que el juzgado de guardia instruye el sumario judicial para obtener la autorización y, en este sentido, los profesionales reunidos en Santander consideran que un mayor conocimiento entre los dos ámbitos, el sanitario y el judicial, puede contribuir a que todo el proceso de donación y trasplante se desarrolle mejor y con más agilidad.
Así lo han explicado la coordinadora nacional de Trasplantes, Blanca Miranda; el coordinador cántabro de Trasplantes, Julio González Cotorruelo; y el director general de Justicia de la Comunidad de Madrid, José Luis López del Moral.
Según López del Moral, cada año en las sucesivas convocatorias de estas ‘Jornadas de encuentro entre profesionales de la Administración de Justicia y la Comunidad Trasplantadora’, que han llegado a su sexta edición, se constata la existencia de una “mayor coordinación” entre ambos ámbitos, así como un aumento del “entusiasmo” de los jueces, debido en parte, a su juicio, a la introducción en sus programas formativos, de aspectos y materias relacionadas con los trasplantes.
Al mismo tiempo, agregó, “cada vez se nota más sensibilidad” de los jueces en favor de una mayor agilidad en la tramitación de las autorizaciones, a pesar de que el juez de guardia es una “persona sobrecargada de trabajo” y hasta la que “cuesta llegar”.
Del mismo modo, subrayó que la implantación de la nueva legislación de los juicios rápidos, con el consecuente incremento de trabajo que supone para los juzgados de guardia, no ha “afectado” ni “retrasado” las autorizaciones, que tienen una carácter “extraordinariamente urgente”.
López del Moral también se refirió a la nueva ley 41/2002 que, entre otros aspectos, regula el denominado ‘testamento vital’ y que, según indicó, “viene a complementar” la legislación sobre trasplantes, especialmente en lo que se refiere al principio del ‘consentimiento presunto’, incluyendo la posibilidad de que el cuerpo de un fallecido, además de poder utilizarse para trasplantes, pueda ser también destinado a investigación científica, si no existe negativa previa expresa.
Trasplantes en la formación docente
Por su parte, Blanca Miranda se refirió a la importancia de la implantación, dentro de los programas docentes, de formación relativa a los trasplantes, tanto desde la perspectiva sanitaria como desde la judicial. Se trata de una propuesta que ya se desarrolla en el caso de los jueces que, además, cuando están en periodo de prácticas pueden seguir en directo todo el procedimiento para conocerlo de primera mano.
Asimismo, Miranda explicó que el objetivo de estas jornadas es poner en común las experiencias y conocimientos de los profesionales de los dos ámbitos y recordó que, desde su inicio, se ha ampliado el número de ponencias e intervenciones, al tiempo que se ha diversificado también su temática.
Finalmente, Julio González Cotorruelo señaló como uno de los principales objetivos de la comunidad trasplantadora la reducción del número de negativas para evitar que haya pacientes que sigan falleciendo en lista de espera por falta de órganos.