Los activistas pro-aborto americanos han lanzado una campaña para forzar a la pequeña nación centro-americana de Costa Rica a dar marcha atrás en su prohibición de Fecundación In Vitro (FIV). Costa Rica y Libia son los únicos países en el mundo donde la FIV es ilegal. Ahora el Centro para …
Los activistas pro-aborto americanos han lanzado una campaña para forzar a la pequeña nación centro-americana de Costa Rica a dar marcha atrás en su prohibición de Fecundación In Vitro (FIV). Costa Rica y Libia son los únicos países en el mundo donde la FIV es ilegal. Ahora el Centro para los Derechos Reproductivos, un grupo de presión con base en Nueva York, está apoyando a varias parejas en su apelación ante la Comisión Inter-americana de Derechos Humanos. La apelación argumentará que la prohibición viola el derecho de las parejas a tener hijos y a desarrollar sus propias familias bajo la legislación internacional de derechos humanos.
En el año 2000, la Corte Suprema de Costa Rica reguló que la FIV violaba la Constitución nacional, derrocando así un decreto presidencial de 1995 que la había permitido. La Corte sostuvo que la vida humana comienza en el momento de la concepción y que el embrión es titular de la protección que ofrece la ley. La FIV sitúa a la vida humana en un gran riesgo porque muchos de los embriones perecerán, mantuvieron.
El Centro para los Derechos Reproductivos espera que una decisión en su favor tenga un efecto flujo por toda América Latina. “Gobiernos y Cortes del Norte y Sur de América podrían citar su resolución, así como la de la Corte Suprema de Costa Rica, para el desarrollo y la interpretación de sus legislaciones en lo que se refiere a tecnología reproductiva, contracepción y aborto”, afirman.
Extraído de BioEdge 147.