Es una pregunta tan frecuente entre los padres que buscan ayuda para su hijo con disforia de género que casi se ha convertido en un meme, y además morboso.
En la superficie, “¿Preferirías una hija muerta o un hijo vivo? Suena como una petición de compasión y comprensión.
Funcionalmente, sin embargo, este llamamiento cierra todo debate público, sofoca cualquier reacción de los padres y coloca a los jóvenes vulnerables en una cinta transportadora hacia riesgosos tratamientos hormonales e intervenciones quirúrgicas radicales.
Ahora se trata de una cuestión cuyas premisas gemelas han sido refutadas por uno de los estudios más sustanciales jamás realizados sobre el tema.
Evidencia
Publicado en enero, el artículo de investigación de BMJ Mental Health encontró que la disforia de género no coloca a los jóvenes en un mayor riesgo de suicidio y que la llamada “atención de afirmación de género” no alivia el riesgo de suicidio en los jóvenes que la buscan.
El estudio se llevó a cabo en Finlandia, uno de los muchos países del norte de Europa que aún se están desintoxicando de los embriagadores días del “Protocolo holandés“.
Los investigadores analizaron conjuntos de datos completos de los registros sanitarios nacionales, identificando a más de 2.000 personas (con una edad media de 18,5 años) que experimentaron angustia de género en los años 1996 a 2019.
A diferencia de estudios similares que pierden muchos pacientes en el proceso de seguimiento, el uso de registros nacionales permitió seguir a toda la cohorte durante todo el período de tratamiento, que duró una media de seis años.
El equipo de investigación creó un grupo de control emparejando a cada sujeto con cuatro hombres y cuatro mujeres de un grupo de edad y municipio de nacimiento equivalentes, para un total de más de 16.000 sujetos de control.
Si bien los investigadores encontraron tasas más altas tanto de mortalidad por suicidio como de mortalidad por todas las causas entre los jóvenes con problemas de género, una vez que se tuvo en cuenta su historial de tratamiento psiquiátrico, esas diferencias desaparecieron.
“La disforia de género per se no parece predecir ni la mortalidad por todas las causas ni la mortalidad por suicidio en adolescentes referidos por género“, concluyeron los investigadores.
El “principal predictor de mortalidad en esta población es la morbilidad psiquiátrica“, señalan.
“La reasignación médica de género no tiene un impacto en el riesgo de suicidio”.
Profundizando más, explican:
En este estudio de seguimiento a largo plazo, representativo a nivel nacional, basado en registros, la mortalidad por todas las causas de los adolescentes referidos por género no difirió estadísticamente de manera significativa de la de los controles de población emparejados. Al principio, la mortalidad por suicidio pareció ser mucho mayor entre los participantes referidos por género; sin embargo, la asociación se explicó completamente por el historial de tratamiento psiquiátrico. Las mortalidades por todas las causas y por suicidio no difirieron entre aquellos referidos por género que habían procedido y no a GR [reasignación de género: tratamientos hormonales masculinizantes/feminizantes, mastectomías y/o cirugía genital] cuando se tuvo en cuenta el historial de tratamiento psiquiátrico.
“Esto no respalda las afirmaciones de que la GR sea necesaria para prevenir el suicidio“, concluyó el equipo de investigación.
Prevención de daños
El periodista australiano Bernard Lane, editor de Gender Clinic News, es una de las fuentes más autorizadas sobre medicina de género, según Michael Cook de Mercator.
Lane ha calificado el nuevo artículo finlandés como “investigación histórica” en un campo dominado por “encuestas anónimas en línea de baja calidad sin controles de seguimiento, exageración potencial impulsada por una narrativa constante de ‘transición o suicidio’ y ‘muestras de conveniencia’. ‘Es poco probable que sea representativo”.
Escribe:
El nuevo estudio finlandés reivindica la adopción por parte de ese país en 2020 de una política de tratamiento más cautelosa que se centra primero en los problemas psiquiátricos, sociales y educativos entre los jóvenes con problemas de género antes de cualquier asunción de una identidad trans estable que justifique una afirmación “experimental ” con hormonas o cirugía.
Lane mostró especial interés en la participación del psiquiatra Riittakerttu Kaltiala en el último estudio finlandés.
Kaltiala “ayudó a ser pionera en la medicina de género pediátrica en Finlandia“, explica Lane, “pero se preocupó cuando ella y sus colegas no vieron los buenos resultados prometidos por el ‘protocolo holandés’ imitado internacionalmente de bloqueadores de la pubertad seguidos de hormonas y cirugía de sexo cruzado“.
Aparte del estudio finlandés, la celebridad televisiva Dr. Phil apareció en una entrevista con Joe Rogan, en la que se manifestó en contra de todo lo relacionado con la “atención de afirmación de género”.
“Pensé que el trato era, en primer lugar, no hacer daño“, le dijo el Dr. Phil a su anfitrión. “Nunca he visto a las organizaciones [médicas más importantes] aprobar algo con menos información sobre si causa o no daño a largo plazo en mi vida”.
🚨NEW: Joe Rogan and Dr. Phil discuss the American medical system's endorsement of hormonal therapy and sexual reassignment surgery for children.
"I thought the deal was first do no harm."
"They choose words like 'gender-affirming care,' but really what they're talking about is… pic.twitter.com/tatUap16WR
— KanekoaTheGreat (@KanekoaTheGreat) February 20, 2024
Dondequiera que se mire, el discurso de “cirugía trans o suicidio” está en sus últimas etapas.
Australia y América, deber tomar nota.
No podría haber mejores noticias para los niños con confusión de género, quienes en los próximos años finalmente podrán acceder a la atención que realmente necesitan.
Publicada en Mercatornet por Kurt Mahlburg | 26 de febrero de 2024 | ‘Would you rather a dead daughter or a living son?’ debunked by Finnish study